Este domingo se ha celebrado por fin en Cataluña el referendum del ya famoso Estatut. El resultado ha sido un 70% a favor del sí, con un 49% de participación. Oigo en la radio que la participación ha sido baja y que eso podría deslegitimar el resultado. ¿Por qué? Yo no lo veo así.
La abstención es una postura tan válida como otra, pero no me gusta porque significa pasividad o, mejor dicho, pasotismo. Si ejerces la abstención luego no tienes derecho a quejarte del resultado porque tuviste una oportunidad de influir en él (pequeña pero ahí está) y no lo hiciste. No hay excusas. Y una gran abstención puede ser significativa, pero no tiene validez, desde mi punto de vista.
Además, como mecanismos de protesta están el voto blanco o el voto nulo, que sí se desprenden de una participación activa en el proceso electoral. ¡Qué lástima que nadie los tenga en cuenta!
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