jueves, diciembre 28, 2006

Pérdida de memorias

El ordenador me da problemas. Al hacer un back up me he dado cuenta de que han desaparecido los ficheros de mi diario correspondientes a varios años. Me temo que son bastantes y que han desaparecido del año 2001 al 2004. Es decir, han desaparecido mis impresiones del final de carrera, de mis primeros meses en paro, del 11-S, del 11-M, de mi paso por Minorplanet y de mi infierno con El Cóndor, entre otros sucesos

Una parte de mí está apenada porque supone una pérdida irreparable. Muchos recuerdos permanecen indelebles en la memoria, pero otros no. Mis comentarios, mis sentimientos de entonces, y mis percepciones se han perdido para siempre (bueno, todavía confío en encontrar el antiguo backup).

Pero, para mi sorpresa, otra parte de mí siente indiferencia ante este hecho. ¿Acaso aquello, que consideraba tan preciado, no lo es en realidad?

Se me plantea la cuestión de por qué escribo un diario, si realmente tiene algún sentido. Lo hago desde hace mucho tiempo. Antes me servía para desahogarme, quizá ahora también, aunque en el fondo cubre también una necesidad de ser eterna, de no desaparecer del todo cuando llegue la muerte porque mis recuerdos estarán ahí. Ahora bien ¿quién va a leerlos cuando se trata de un diario privado? ¿Deseo exponerme realmente? Porque si hay algo que temo es la crítica.

Y visto lo visto, en cualquier momento pueden desaparecer. Y así debe ser, porque las palabras son de aire y al aire no se le puede retener, no se le debe retener.

No hay comentarios: